Como resultado del comportamiento de la producción, los precios internacionales también estuvieron marcados por dos tendencias durante 2009/10. De un lado, se registró una relativa estabilidad, alrededor de 1,4 USD/lb, durante el primer semestre ocasionado por las expectativas de la cosecha brasilera y la apreciación del dólar. Mientras que durante el segundo semestre, mostraron un fuerte repunte por encima de los 2 USD/lb debido a la certeza de una menor oferta y la entrada de los fondos de inversión en el mercado de las materias primas.