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Paisaje cultural Cafetero. Huellas materiales e inmateriales Paisaje cultural Cafetero. Huellas materiales e inmateriales


DOI

Palabras clave
Institucionalidad Agrícola

Conservación Ambiental

Patrimonio Inmaterial

Sección
Videos
Federación Nacional de Cafeteros de Colombia

Resumen

El 25 de junio de 2011 la UNESCO incluyó el territorio del Paisaje Cultural Cafetero de Colombia (PCCC) en la categoría de Paisajes Culturales. Se reconoce la belleza del territorio, una inmensa región montañosa y fértil, poblada por un grupo de personas de cultura muy especial, donde predominan costumbres y tradiciones que el tiempo y la vida moderna no han podido borrar. Para explicar lo anterior hay que hacer un largo recorrido histórico y cultural por el territorio del PCCC, que comprende amplias regiones de los departamentos de Caldas, Risaralda, Quindío y Valle del Cauca; por esta razón la ponencia comprende los siguientes aspectos: primeros habitantes del territorio, las migraciones antioqueñas del período republicano, las fundaciones de aldeas y pueblos, los caminos de herradura, la arriería, el café y la cultura cafetera, los mitos folclóricos; relatos populares, diversión y entretenimiento, la cocina y los sabores, oficios de antaño y, por último, los símbolos de pertenencia y de identidad. Este es un largo recorrido por la historia seductora del Paisaje Cafetero, un territorio que ha sido transformado por varias generaciones de campesinos que se enfrentaron a la selva, tumbaron árboles, levantaron parcelas, trazaron caminos, construyeron fondas, posadas y fundaron aldeas en los filos de las montañas. Después surgieron modernas vías de comunicación, brotaron pueblos y ciudades. El café evolucionó en la finca tradicional asociado con otros cultivos, se creó el mercado interno y la región se vinculó con el país y con el mundo. Los pobladores moldearon la geografía y cambiaron el paisaje. El trabajo comunitario por medio de convites entre vecinos permitió la cohesión e integración social. Las narraciones de cuentos, mitos y leyendas, alrededor del fogón de leña, estimuló el amor por el terruño y el surgimiento de una cultura muy especial donde predominan costumbres y tradiciones que el tiempo y la vida moderna no han podido borrar.